El 29 de mayo de 1918 tuvo lugar la solemne de la inauguraci6n del Teatro Marín. Era alcalde de Teruel, Luis Doporto Marchiori. A lo largo de diez décadas, Teruel ha encontrado adecuado marco para celebrar las más importantes manifestaciones artísticas, culturales, sociales e incluso políticas, siendo una de las mayores aportaciones del Circulo de Recreo Turolense a la ciudad, que lo construyo a sus expensas.
Las razones por las cuales el Casino acometió tamaña empresa hay que buscarlas en la situación que ofrecía la ciudad para acoger eventos culturales y artísticos tan prodigados en la época.
Reseña inaugural
La revista "Teruel" en su número 2 aparecido en julio de 1918 dirigida por Diego Teruel, se hizo eco de las iniciativas del Casino, de los pormenores de la construcción del teatro y de su inauguración. Bien vale la pena que recordemos la efeméride y conozcamos el contenido de la reseña...

EL NUEVO TEATRO
"En la ciudad de Teruel existe un teatro pequeño y antiguo que carece de las condiciones que requieren actualmente esta clase de edificios para su servicio y confort. Desde muchísimos años, se venía sintiendo la necesidad de dotar a la capital de un edificio que pudiera recibir el calificativo de teatro y que los turolenses pudieran acompañar al mismo, sin avergonzarse, a las familias forasteras que venían a visitarnos."
Hace referencia al Teatro Principal, que tenía capacidad para unas 700 personas y que fue cedido al Estado para la construcción de la Administración Principal de Correos en 1930 en la calle Yaguë de Salas.
"...Inútiles fueron cuantas tentativas se llevaron a efecto, pues nadie creía en la realidad de afrontar el capital necesario para ello y la menor dificultad de encontrar solar adecuado para su emplazamiento. Con este estado de cosas, la Junta Directiva del Circulo de Recreo turolense, presidida por don José María Rivera, resolvió adquirir casa para dicho Circulo, y después de varios tanteos y negociaciones se gestionó la compra de la que posee en la plaza de San Juan, hay Emilio Castelar, (hace referencia a la casa de los Barones de Escriche, asunto ya mencionado con anterioridad) encargando al arquitecto D. Pablo Monguió el reconocimiento de la finca y redacción de una Memoria sobre la conveniencia de ser adquirida. En la Memoria citada se hacía constar que en la finca de que se trataba podían instalarse cómodamente todos los servicios del Circulo, quedando espacio disponible para un gran salón de fiestas o teatro.

La idea de construir un teatro en el salón del Circulo no cayó en saco roto, procediéndose, una vez comprada la finca, a la construcción de un gran salón de fiestas, con miras al teatro.
Un concurso de proyectos puso de manifiesto que para Ia instalación del teatro en el mencionado salón era preciso ocupar para los servicios y accesorios de aquel gran parte de los bajos del edificio, demostrándose al propio tiempo que no era imposible la instalación que se deseaba, a cuyo efecto se compraron unas fincas contiguas al salón de fiestas y se confió al arquitecto Sr. Monguió el estudio de un proyecto de teatro capaz, por lo menos, para 1.000 espectadores, disponiendo para su desarrollado del mentado salón y de las fincas adquiridas.
En 20 de mayo de 1916 se presentó el proyecto, que constaba de Memoria, Ilanos con tres plantas y un accesorio para el foso, sección longitudinal y transversal policromadas y fachadas y presupuesto.
En 29 de mayo de 1918 se inauguraba con todo su esplendor la obra del Sr. Monguió que ha dejado satisfechos a todos los turolenses, siendo un florón más que puede añadir a la serie de bellas construcciones que lleva proyectadas y ejecutadas con satisfacción de los propietarios y embellecimiento de la ciudad. (Se refiere Ia crónica, al estilo modernista que el arquitecto tarraconense imprimió a diversos edificios de la capital).